Descubrir la Torre Hassan

Situada en el corazón de Rabat, la capital de Marruecos, la Torre Hassan es un testimonio del rico tapiz histórico del país. Este emblemático minarete, conocido localmente como «Tour Hassan», es una visita obligada para cualquiera que explore las maravillas culturales y arquitectónicas de Marruecos.

Un monumento a la ambición

Encargada por Abu Yusuf Yaqub al-Mansur, tercer califa del califato almohade, la Torre Hassan debía ser el mayor minarete del mundo. La construcción comenzó en 1195, con la visión de crear una gran mezquita que sería la mayor del mundo musulmán occidental. Sin embargo, el ambicioso proyecto quedó incompleto tras la muerte de al-Mansur en 11991.

Maravilla arquitectónica

A pesar de su estado inacabado, la Torre Hassan sigue siendo una maravilla arquitectónica. Con 44 metros de altura, el alminar de arenisca roja está adornado con intrincados patrones geométricos y motivos decorativos que reflejan el estilo almohade. La torre fue diseñada para tener el doble de su altura actual, pero incluso en su forma incompleta, su presencia es majestuosa.

Importancia histórica

La Torre Hassan es más que una maravilla arquitectónica: es un símbolo del patrimonio histórico y cultural de Marruecos. El emplazamiento también incluye los restos de la mezquita, con 348 columnas y los inicios de varios muros, que ofrecen una visión de la grandeza que se vislumbraba. El complejo se complementa con el Mausoleo de Mohammed V, que alberga las tumbas del rey marroquí y de sus dos hijos.

Visita a la Torre Hassan

En la actualidad, la Torre Hassan es Patrimonio Mundial de la UNESCO y uno de los monumentos más visitados de Rabat. Los mejores momentos para visitarla son al amanecer y al atardecer, cuando la luz proyecta un hermoso tono sobre el complejo, convirtiéndolo en un paraíso para los fotógrafos. Se puede llegar fácilmente desde la Medina de Rabat, a pie o en taxi.

Conclusión

La Torre Hassan no es sólo una reliquia del pasado, sino un pedazo vivo de la historia de Marruecos. Su imponente presencia y las historias que encierra la convierten en un destino fascinante para los aficionados a la historia, los entusiastas de la arquitectura y los viajeros por igual. Tanto si visita Rabat por primera vez como si vuelve a visitar sus lugares históricos, la Torre Hassan es un monumento que no debe perderse.